CONSIDERANDO
1.
Que el gobierno de los Estados Unidos de
Norteamérica, en su ofensiva permanente
contra la paz mundial, ha sido y es el
mayor violador de los Derechos Humanos y del Derecho Internacional en todos los
rincones del mundo, incluso en su propia tierra.
2.
Que el Presidente de los E.E.U.U. Barakc
Obama, ha decidido agredir e injuriar gravemente al pueblo venezolano,
emitiendo un Decreto-Ley, donde califica
a nuestro país como “una “amenaza inusual y extraordinaria a la seguridad
nacional y política exterior de EEUU.”. Calificación írrita, que devela la
desesperación de los factores hegemónicos estadounidenses, quienes ante la incapacidad
manifiesta de la contrarrevolución venezolana por hacerse del poder, ha
decidido asumir directamente las riendas para derrocar a la Revolución
Bolivariana; por otro lado, muestra la decadencia de su hegemonía como imperio.
3.
Que los sectores hegemónicos de E.E.U.U.
esgrimen como pseudo argumento de tal
injuria, presuntas violaciones a los
derechos humanos en nuestro país, negando nuestra soberanía y estado de
derecho.
4.
Que la ultra derecha yanqui, ha sido y es históricamente culpable de una
gama de acciones injerencistas (invasiones, intervenciones, derrocamientos y
masacres), que han ocasionado millones de pérdidas humanas. Sin ir atrás en la historia, la vergüenza de
la cárcel de Guantánamo, ocupada por
E.E.U.U. para depositar hombres y mujeres secuestrados en todo el mundo, al
margen de cualquier consideración
jurídica e incluso humanitaria, sigue operando en suelo cubano, para
recordarnos la soberbia imperialista y su completo desprecio por la vida
humana. Mirando otros rincones del orbe: Ucrania, Libia, Irak, Afganistán y
Siria, dan cuenta del saldo sangriento que los E.E.U.U. y sus aliados de la O.T.A.N. han dejado
impunemente.
5.
Que el pueblo venezolano ha manifestado
siempre una profunda vocación de paz, a la par de una arraigada vocación
libertaria. Manifestadas hoy más que nunca en la disciplinada y heroica
resistencia que hemos asumido frente a todas las agresiones emanadas por los
sectores de la burguesía supeditados a los intereses imperiales, a saber:
guerra económica, guerra psicológica, guerra mediática y ataques paramilitares.
De igual manera, recordamos a nuestros enemigos, que en estas tierras que hoy
pretenden neo colonizar, en los tiempos del imperio español, bajo el mando de
Bolívar, en medio de las mayores adversidades, logramos nuestra primera independencia.
6.
Que por encima de cualquier pase de factura, nuestra
soberanía no se discute con ninguna potencia. Así, el destino que nuestro
pueblo ha elegido es el socialismo, la integración latinoamericana y la
construcción de un mundo multipolar. Y que somos y seremos siempre los hombres
y mujeres de esta tierra, quienes llevaremos el rumbo de la patria.
ACORDAMOS
1.
Respaldar de manera irrestricta al Presidente
Constitucional de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros,
quien desde el ejecutivo nacional hoy asume la tarea de encarar con dignidad,
la más brutal agresión que se haya cernido jamás sobre nuestra patria.
2.
Denunciar internacionalmente al imperio
norteamericano, en su pretensión injerencista y guerrerista contra nuestra
patria. En tal sentido, es imprescindible romper el cerco informativo ejecutado
por las transnacionales de la comunicación.
3.
Agradecer las muestras de solidaridad
expresada por los compañeros Evo Morales, Rafael Correa, Daniel Ortega, Fidel
Castro y Raúl Castro, quienes en una
ofensiva diplomática han puesto en alerta a Latinoamérica y al mundo. Dejando
claro que Venezuela no está sola, y que en el concierto internacional, contamos
con apoyo que se traduce en una inmensa
mayoría de la humanidad que hoy rechaza la actitud guerrerista del imperio
yanqui contra nuestra amada patria.
4.
Expresar nuestro apoyo y solidaridad a los 7
compatriotas ilegalmente sancionados por un imperio que pretende desconocer
nuestra soberanía e institucionalidad.
5.
Hacer un llamado a la unidad del pueblo
venezolano. Todos, sin distingo de ninguna naturaleza, en una sola voz, debemos
repudiar y rechazar contundentemente la actitud arbitraria y agresiva asumida
por el gobierno norteamericano contra el pueblo venezolano; toda vez, que la
misma busca preparar las condiciones que faciliten una acción militar a gran
escala contra el territorio nacional.
6.
Derrotar a la derecha en su guerra económica
contra el pueblo, asumiendo de manera prioritaria la producción popular en
todas las organizaciones sociales, consejos comunales y comunas, conjugando la
capacidad financiera del estado y los poderes creadores del pueblo.
7. Promover, coordinar y ejecutar la
movilización permanente de todos los sectores revolucionarios, con miras a
defender la paz de nuestra patria.
8.
Apoyar de manera sistemática la aplicación de
medidas severas, que dentro de nuestro marco jurídico, recaigan sobre quienes
ejecuten actividades de conspiración, bachaqueo, sabotaje y desestabilización.
9.
Alertar a la militancia del Movimiento Revolucionario
Tupamaro, y a todos los sectores revolucionarios para organizar, ante esta
arremetida imperialista, la resistencia de todo el pueblo.
En Venezuela hay un pueblo
digno, por nuestra venas corre sangre de libertadores, que lo sepa el imperio y
sus vasallos, estamos preparados no sólo para hacer frente y resistir cualquier
embestida, sino, para vencer. Camaradas, por el bien de la patria y de la
humanidad toda: “No podemos optar entre vencer o morir, necesario es vencer”, Y
VENCEREMOS
¡No
al imperialismo!
¡Viva
Venezuela libre y soberana!
¡Viva
la patria de Simón Bolívar!
¡Vivan
los pueblos del mundo!
Hasta
La Victoria Siempre
A
los diez días del mes de marzo de 2015
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